La talla de los guantes de box está determinada por diferentes factores, y cada uno de ellos cumple una función en base a diferentes perspectivas.
Sí, descuida. Al comienzo, puede ser algo complejo de entender, pero acá te lo vamos a explicar parte por parte.
En primer lugar, debes entender las “tallas” en las que se dividen los diferentes guantes de boxeo que existen en el mercado.
De ahí, iremos avanzando hacia elegir tus guantes según el uso que quieras darle. Y, por último, te daremos algunos consejos acerca de los diferentes materiales en los que podrás encontrarlo.
Tus guantes de box en OZ y uso
Los guantes de boxeo no se miden en tallas como M, S, o XL. Estos se dividen acorde al peso en relleno que posean. La razón es que este se basa tanto en la protección de quien los usa, como el uso que se le va a dar.
Las medidas de los guantes van de 4 a 20 Oz, pasando por todos los números pares entre ellos.
Los primeros dos, es decir, los de 4 Oz y 6 Oz, son utilizados por niños o menores de edad, y son ideales para iniciarlos en la disciplina al tener un peso ligero. Los que son de 8 Oz a 10 Oz pueden ser utilizados por deportistas amateur. No obstante, su peso también resulta ideal para profesionales Welter.
Cuando se desea cumplir con un entrenamiento duro, es importante tener en cuenta los guantes de 12 Oz. Cuentan con la protección y peso adecuado para forzar la resistencia del deportista sin poner en peligro sus manos. También se les recomienda a las mujeres boxeadoras.
Los de uso regular pueden ser de 14 Oz, ya que permiten uso con saco o sparring, favoreciendo el aumento de fuerza en los brazos y la velocidad. Pero si el deportista supera los 80 kg, lo ideal es que opte por guantes de 16 Oz.
Finalmente, en dado caso que se desee ejecutar un entrenamiento específico, es necesario utilizar guantes de 18 Oz a 20 Oz, y que quien los use supere los 95 Kg.
Materiales de guantes de box
Existen dos grupos de materiales que se emplean para fabricar guantes de box, teniendo cada uno de ellos puntos clave específicos que pueden resultar ideales según al rendimiento del deportista.
En el primer grupo se encuentran los naturales, que suelen estar hechos a base de piel de vaca, búfalo o cabra. Aunque su costo es elevado, ofrecen una mayor resistencia, tanto para uso diario como para entrenamiento específico. Así mismo, cuenta con una prestación a protección de golpes e impactos única en su clase.
Por otro lado, están los sintéticos que pueden ser hechos de PVC y polipiel. Los primeros resultan los más accesibles del mercado. No obstante, su durabilidad es muy baja e incluso existen centros de entrenamiento que los tienen prohibidos.
Los de polipiel, por otro lado, son comunes entre los principiantes. Es posible encontrar una calidad media entre los de PVC y los de piel de animal. Así mismo, hay de toda gama, talla y uso, algunos incluso pueden emplearse en competición.